Nos sangran los ojos.

Cuando vemos a personas que alargan durante días sus lentes de contacto diarias, que las reutilizan sin limpiar o que no se las quitan ni para dormir.
Cuando vemos a personas trabajando sin protección ocular homologada en sectores industriales o agrícolas en los que hay una gran exposición al fuego, al frío, a los tóxicos volátiles y a las sustancias peligrosas.
Cuando vemos a personas pasando todo el día en la playa o en la nieve sin unas buenas gafas de sol que protejan sus ojos de los dañinos rayos ultravioleta.
Cuando vemos a personas llevando gafas de sol de imitación, de esas baratas que venden los mercadillos, que son en realidad tan perjudiciales para la salud ocular.
Cuando vemos a personas mirando directamente al sol durante un eclipse.
Cuando vemos a personas que pasan horas y horas delante del ordenador, sin hacer descansos, sin apartar la mirada, sin apenas pestañear.
Cuando vemos a personas utilizar maquillaje barato, sin saber su procedencia ni su composición, maquillaje que pueden contener sustancias muy peligrosas para los ojos.
Cuando vemos a personas nadar en la piscina sin gafas protectoras.
Cuando vemos a personas frotándose los ojos con las manos sucias cuando están cansadas o para quitarse un cuerpo extraño que les acaba de entrar.
Sí, cuando vemos a otros ojos maltratados, desprotegidos, agredidos… en Zamarripa Ópticos nos sangran los ojos. Pero mucho.