Cómo prevenir el Síndrome Visual Informático
Sí, suena a virus de ordenador. Pero tranquilidad. Sobre todo, porque se puede prevenir.
También se le llama “fatiga visual digital”, y como has deducido muy acertadamente, estamos hablando de un problema relacionado con la exposición prolongada a los dispositivos con pantallas.
¿Quién se libra de esto hoy día?, estás pensando también. Y tienes razón, en el primer mundo, al menos, las pantallas se han convertido en el pan nuestro de cada día.
Sin ánimo de alarmar, sino todo lo contrario, desde Zamarripa Ópticos hoy te animamos a adquirir ciertos hábitos que te ayudarán a proteger tu vista de los perjuicios derivados de este problema.
Un poco de información no viene mal: de qué estamos hablando exactamente
Vas a entender mejor el SVI, y cómo prevenirlo, cuando sepas que este síndrome ocurre por una combinación de factores asociados al uso de pantallas digitales. Este es un resumen de las causas más habituales:
- Tiempo prolongado de uso: Es decir, mantener la vista fija en pantallas durante muchas horas sin descansos adecuados.
- Parpadeo reducido: Las personas tendemos a parpadear menos cuando miramos pantallas, lo que provoca sequedad ocular.
- Configuración inadecuada del entorno: Este síndrome se acentúa si tenemos mala iluminación, reflejos en la pantalla, una postura incorrecta o una distancia inadecuada entre los ojos y la pantalla
- Calidad de las pantallas: No es lo mismo trabajar delante de una pantalla que hacerlo delante de una pantalla con brillo excesivo o una resolución deficiente.
- Problemas visuales no corregidos: La cosa se complica si padecemos miopía, hipermetropía, astigmatismo, presbicia… y no están correctamente detectados.
- Calidad del contenido visual: Si en la pantalla el texto es muy pequeño o hay contrastes incómodos que dificultan la lectura, la cosa empeora.
Los ingredientes de ese cóctel provocan estos incómodos síntomas
En Zamarripa nos ocupamos de la vista, por eso sabemos que este síndrome tiene síntomas puramente oculares…
- Fatiga ocular.
- Sequedad o irritación ocular.
- Enrojecimiento de los ojos.
- Sensación de arenilla o picazón.
- Visión borrosa o dificultad para enfocar.
- Sensibilidad a la luz.
… y otros de carácter más general:
- Dolores de cabeza.
- Dolor de cuello, hombros o espalda (por posturas inadecuadas al usar los dispositivos).
- Dificultad para concentrarse en el texto…
- Etc.
De lo que no cabe duda es de que padecerlos merma tu calidad de vida. Así que vamos a ver cómo prevenirlos.
Buenos hábitos para tu vista
Aunque no es un problema grave, el SVI puede ser muy molesto y afectar a tu productividad. Aquí te damos algunas estrategias para prevenirlo y controlarlo:
1. Regla 20-20-20:
Cada 20 minutos, mira algo que esté a 20 pies (6 metros) de distancia durante al menos 20 segundos.
2. Trabaja a una distancia adecuada para tus ojos:
Coloca la pantalla a una distancia de 50-70 cm de los ojos, con el borde superior al nivel de los ojos.
3. Ajusta la pantalla y la iluminación:
Acostúmbrate a ajustar el brillo y el contraste según la iluminación ambiental.
4. Lubricación ocular:
Si es necesario, utiliza lágrimas artificiales para evitar la sequedad.
5. Parpadeo consciente:
Sé consciente de tu parpadeo y aumenta la frecuencia del mismo.
6. Revisión optométrica:
No olvides tu revisión periódica en Zamarripa para detectar problemas visuales.
Buenos hábitos para tu cuerpo
Aprovechando que estamos hablando de mejorar tu calidad de vida, además de buenos hábitos visuales te recomendamos adquirir buenos hábitos corporales para conjurar los efectos del SVI.
1. Mantén una postura correcta
¿Y qué es una postura correcta? Es sentarse derecho con los pies apoyados en el suelo y los hombros relajados. Este hábito reduce la tensión en el cuello, la espalda y también en los ojos.
2. Utiliza una silla ergonómica
Asegúrate de que tu silla proporcione soporte adecuado a la parte baja de la espalda y te permita sentarte cómodamente durante periodos largos. No lo pienses más: invertir en una buena silla es invertir en tu salud a largo plazo.
3. Coloca el teclado y el ratón correctamente
Ambos deben estar al nivel de los codos o un poco por debajo para evitar tensión en los brazos y hombros.
4. Realiza descansos frecuentes
Si en tu día a día trabajas con pantallas, haz pausas regulares, de unos 5-10 minutos cada hora, para relajarte y cambiar de postura.
En Zamarripa podemos ponerle remedio
Quizá leyendo esto has caído en la cuenta de que sufres la mayor parte de los síntomas del Síndrome Visual Informático. En ese caso acércate y te echamos un vistazo.
No tienes pérdida: nos encontrarás en el centro de Tudela. Pide cita hoy mismo en Zamarripa, la óptica de referencia de La Ribera.